Convulsiones

Mejor dicho accesos de escribidor me han asaltado en los últimos días, como síntomas de una soledad rebelde que en mi convalescencia se resiste a dejarme levantar...



Hoy, confundí una hoja reseca, tirada en las baldosas, con una cucaracha que trataba de atacarme y esa actitud casi psicótica me despertó de la realidad…

El sol acaricia todo hasta derretir los termostatos, pero tu mirada sigue ahí desenhebrando mi formalidad, descuajándolo todo, como si le pertenecieran el mundo y mis alegrías.

El cielo crepuscular aparece y se escabulle en cada parpadeo, dejándome sin aliento. Puedo soportar la indiferencia, pero me hiere la ausencia de tu mirada.

el goma ilustrado