otra vez traspasado

como hace muchos años en la universidad, sin un maestro que te enseñara a canalizarlo, mis habilidades para medium se quedaron en una condición de torpeza intuitiva y sin usar por mucho tiempo.

Afloraron algunas veces, con los difuntos de algunos amigos que me hacían decir algunas cosas a los que quedaron de este lado.

Hoy, en la casa de una amiga, que me contaba sobre la muerte de un amigo muy querido para ella, comencé a sentirme demasiado conmovido, luego los escalofríos, los temblores y la piel erizada. Hasta que entendí que él había venido a despedirse, se lo dije a mi amiga y pude descansar.

Quedé con esa sensación de choque eléctrico y con un agotamiento indescriptible. El amigo fue muy gentil en el traspaso (fue como un ardor frío) pero a la vez muy intenso.